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Gaur egungo informazioa
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Actualidad informativa
20 de enero de 2015
El CGPJ, demandado por no tener un plan de riesgos
Jornadas de 13 horas, 19 causas e
infartos: los 'riesgos' de ser juez
La carga de los juzgados ha aumentado con la crisis y la corrupción. En la imagen, juzgado de lo Social
no. 16 de Madrid, en el juicio por el despido del PP de Luis Bárcenas.
"SUSPENDIDOS". Es lo que se lee a la izquierda de los 19 juicios que el juez Ángel
Luis del Olmo tenía apuntados en su agenda para la mañana del 2 de julio de 2013. 19
juicios, establecidos con diez o cinco minutos de diferencia los más, dos de ellos a la
misma hora -9,15 de la mañana-, y un tercero un minuto antes, a las 9,14. Aquella era
una jornada normal para el juez Del Olmo: desayuno hacia las 8 en una cafetería
próxima a los juzgados de lo social de la calle Princesa de Madrid -el suyo era el 25-;
mañana llena de juicios; tarde en su despacho para hacer las sentencias; salida, según
relata un compañero ("Muchos seguimos trabajando en casa, pero Ángel Luis vivía en
el juzgado") siempre pasadas las 10 de la noche. Más de 13 horas de jornada que
aquel 2 de julio de 2013 no llegaron a comenzar: en el ascensor en el que subía a la
planta 8ª, la de su juzgado, se desmayó a causa de un infarto, lo sacaron al rellano y
allí -en el edificio no había desfibrilador- falleció.
Alguien escribió en su agenda en letras mayúsculas, al lado de sus 19 juicios:
"SUSPENDIDOS". Quizá fuera la entonces secretaria de su juzgado, que hoy declara:
"Se implicaba mucho. Hubo días que celebró hasta 21 juicios, y él llevaba las
sentencias, que podían llegar a 38 a la semana, al día. Estábamos allí todas las tardes, y
no éramos los únicos". Ángel Luis del Olmo había tenido algún tropiezo en su carrera,
pero en los juzgados de lo social muchos lo recuerdan ante todo como un hombre tal
vez peculiar, pero sobre todo trabajador. Había sustituido a un interino que, a su vez,
sustituyó a otro juez con incapacidad también por problemas cardiacos.
Pilar Varas, compañera de Del Olmo en lo social, lleva un infarto y una angina de
pecho: "Obviamente, no se trataba sólo de un problema de estrés, yo tenía colesterol.
Pero el estrés actúa de detonante, y desde luego en las salas de lo social, en Madrid, el
estrés es común". De otro juez de la capital, este de mercantil, cuentan que pedía su
cartera con los expedientes mientras se lo llevaban en camilla, víctima también de
un infarto.
Agenda de Ángel Luis del Olmo el día de su fallecimiento.
Son, quizá, la muestra más lacerante de una realidad, la de la sobrecarga de trabajo en
muchos juzgados, que ha motivado, en buena parte, una demanda de conflicto colectivo
de la Asociación Jueces Para la Democracia contra el Consejo General del Poder
Judicial y el Ministerio de Justicia ante la Audiencia Nacional que se verá, si no hay
acuerdo previo, el 3 de febrero. En ella los acusa de haber incumplido su obligación de
evaluar "los riesgos, incluidos los psicosociales, para la seguridad y salud" de jueces y
magistrados y la de "elaborar un Plan de prevención de riesgos laborales" (son quizá el
único colectivo de empleados públicos que no lo tienen) y pide a la Audiencia, entre
otras cuestiones, que los inste a la "inmediata adopción de medidas de protección".
Tras la demanda, pionera, está la negociación de un Sistema de Prevención de Riesgos
Laborales que contemple la carga máxima de trabajo de los jueces y magistrados.
Tanto el Consejo como el Ministerio se comprometieron a adoptarlo en 2010 y, según
declaraban la pasada semana en el CGPJ, el tema se reactivó no desde que se interpuso
la demanda, sino desde la formación del nuevo Consejo: existe, dicen, un borrador y
prevén aprobarlo antes de fin de mes. Este mismo viernes se reunió la Comisión
Nacional de Seguridad y Salud de la Carrera Judicial (CNSS), que cuenta con
representantes del Consejo y de las asociaciones judiciales. Glòria Poyatos,
representante de Jueces Para la Democracia en la Comisión, recalca que su asociación
"mantiene su posición de que se incluyan en el Plan de Prevención las cargas de
trabajo como el riesgo profesional estrella".
La demanda de Jueces para la Democracia cita estudios como el Informe sobre los
Órganos Judiciales que Sobrepasan el 150% de la Carga de Trabajo, que publicó el
CGPJ el pasado año, y que establece que un 43,53% de los órganos judiciales
superan el 150% de la carga de trabajo que el propio Consejo considera normal (allí
aparece el juzgado ante cuyas puertas murió Del Olmo con una sobrecarga del 196%).
También el Informe Urgente sobre Riesgos Psicosociales y Carga de Trabajo en la
Carrera Judicial, elaborado por la sección sindical de la asociación, que determina que
el riesgo piscosocial más grave entre los jueces son las llamadas "exigencias
psicológicas", que ponen en relación el volumen de trabajo con el tiempo disponible
para realizarlo y afectan a un 92% de los jueces.
Carlos Lesmes, presidente del CGPJ, en una reunión de su Comisión Permanente. (Efe)
El resultado tiene un nombre, estrés, y varios perjudicados: Poyatos habla de una "grave
amenaza no sólo para los juzgadores, sino también para la salubridad de la Justicia, pues
una carga de trabajo puede ser una magnífica herramienta política de neutralización
judicial, y un bálsamo en la tramitación de numerosos procedimientos de corrupción,
que se eternizan procesalmente". Antonio Seoane, titular del juzgado de lo Social nº 34
de Madrid, añade otros aspectos: "Con la crisis, aumenta la cantidad de trabajo y
disminuye la calidad, y tú, como juez, eres consciente de ello. Nuestro trabajo no es
como para que nos sintamos orgullosos. No podemos dedicarnos a hacer churros por
sistema", declara, mientras recuerda semanas de 60 juicios y más de 60 horas de trabajo
y habla de juicios que no se preparan previamente y de presiones tal vez excesivas en
ocasiones para que las partes lleguen a una conciliación (y el juez pueda ahorrarse esa
sentencia y dedicar tiempo a otros casos). "El problema es en qué condiciones se hacen
20 juicios en un día", añade este juez, que ha pisado el freno porque "se trata de no
morir en el intento".
A todo esto se une el tipo de temas que llegan a los tribunales con la crisis, de mayor
complejidad -en el caso de lo social, despidos por causas económicas con intervención
de peritos económicos e ingenieros y amplias documentales de 4.000 folios- y carga
emocional: "El de la mujer a la que se concede la pensión y, cuando llega la sentencia,
la hija te dice que falleció hace meses; el de los hermanos despedidos de la fábrica a los
que citas en cinco meses, y te dicen que cómo comen mientras tanto... Es mejor no
enterarse, porque entonces haces lo que hacía Ángel Luis: te metes 20 juicios al
día", explica Seoane. En la agenda de Del Olmo de aquel 2 de julio hay consignados
temas de Seguridad Social, reclamaciones de salarios, despidos, sanciones...
Y luego están los medios, escasos o inapropiados, de los que se lamentan en muchos
juzgados: Miguel Ángel Izquierdo, secretario judicial, describe edificios "del tercer
mundo, con goteras, funcionarios y expedientes apiñados, un archivo que se inundaba
cada dos por tres y programas informáticos que ya están descatalogados. En el decanato
de Navalcarnero, con 6.000 asuntos y seis juzgados, hay un solo funcionario. Faltan
medios materiales y de personal y también organización para distribuir el personal
donde se necesita", apunta.
Jueces Para la Democracia reclama un Plan de Prevención que contemple una carga
máxima de trabajo para los jueces y la sobrecarga como un riesgo laboral. Algo que
pudiera parecer sencillo y que quizá esté tardando tanto porque, como dice Antonio
Seoane, asumirlo implicaría reconocer la necesidad urgente de la justicia española de
"dinero, y jueces, jueces y más jueces".
LA RIOJA.COM
La gestión de la prevención entra en
la escena laboral
Una mujer, almorzando en su puesto de trabajo.
Las actuaciones abogan especialmente por los riesgos psicosociales y
en la extensión de la cultura preventiva en el sector del comercio
riojano
La Dirección General de Trabajo y Salud Laboral programa 58
acciones formativas para este 2015
El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha sentenciado que la incapacidad
temporal de una trabajadora de la Sociedad Foral de Servicios Informáticos de
Guipúzcoa, por un síndrome de ansiedad y depresión derivado de un conflicto
prolongado con su superior jerárquico, debe ser considerado accidente de trabajo. El
TSJPV ha resuelto que la baja laboral de ocho meses de esa mujer «deriva de la
contingencia de un accidente de trabajo» ya que ese síndrome ansioso depresivo le
sobrevino por «la situación de tensión» por motivos exclusivamente laborales, debido al
«incivismo organizacional», dice, de su jefe. La resolución ha destacado que la mujer,
que necesitó diez meses de baja laboral, no había padecido ningún tipo de enfermedad
similar psiquiátrica anterior y ha subrayado que no existían otros condicionamientos
externos como pudieran ser problemas familiares o sociales, que explicaran su estado.
Aparecen, por tanto, en escena los riesgos psicosociales. Porque los riesgos laborales
son muchos y tienen muy diversos rostros. Están por un lado los reconocidos accidentes
laborales que afectan directamente a la integridad física de los trabajadores. El manejo
de las máquinas, los andamios... Son situaciones de riesgo que sin las medidas
necesarias de prevención pueden generar accidentes laborales graves o muy graves. Y
por otro, los riesgos psicosociales, que de no atenderse adecuadamente, provocan
situaciones en los trabajadores de difícil solución.
La tendencia es que las bajas por accidentes físicos tiendan a la disminución porque en
líneas generales se está haciendo un buen trabajo de información y formación de los
trabajadores y empresarios para reducir el número de accidentes. Es la gestión en
prevención de riesgos laborales, un aspecto en el que ha evolucionado enormemente en
los últimos años.
Los riesgos psicosociales se derivan de las deficiencias en el diseño, la organización y la
gestión del trabajo, así como de un escaso contexto social del trabajo, y pueden producir
resultados psicológicos, físicos y sociales negativos, como el estrés laboral, el
agotamiento o la depresión.
Los riesgos psicosociales y el estrés laboral se encuentran entre los problemas que más
dificultades plantean en el ámbito de la seguridad y la salud en el trabajo. Afectan de
manera notable a la salud de las personas, de las organizaciones y de las economías
nacionales. En torno a la mitad de los trabajadores europeos consideran que el estrés es
un elemento común en sus lugares de trabajo, y contribuye a cerca de la mitad de todas
las jornadas laborales perdidas. Como muchas otras cuestiones relativas a la enfermedad
mental, el estrés suele interpretarse mal o estigmatizarse. No obstante, si los riesgos
psicosociales y el estrés se plantean como un problema de las organizaciones, y no
como un defecto personal, se pueden gestionar como cualquier otro riesgo para la salud
y la seguridad en el trabajo.
Formación e información
De ahí que una parte importante del nuevo plan de actuaciones aprobado por el
Gobierno de La Rioja para este 2015 incida especialmente en la gestión de la
prevención de los riesgos psicosociales, sin olvidar otras líneas de actuación como las
relaciones laborales, los químicos y biológicos, lo electroestático y las actividades como
la agricultura, el comercio y la construcción, donde la administración espera un repunte
de la actividad ante la mejora económica y por tanto de los riesgos de que se produzcan
nuevos accidentes laborales.
Fruto de esta mejora en la concienciación, el Gobierno de La Rioja ha puesto en marcha
la nueva oferta formativa en materia de prevención de riesgos laborales y relaciones
laborales para el 2015 que engloba 58 acciones formativas, con el objetivo de consolidar
la cultura preventiva de riesgos laborales a trabajadores y empresarios, desde todos los
niveles de la empresa y desde todos los aspectos de la salud y seguridad laboral para
avanzar hacia la siniestralidad cero, además de impulsar las relaciones laborales. Esta
oferta formativa para este año potencia especialmente el cumplimiento de los programas
acordados en el Plan Riojano de Salud Laboral 2013-2015.
Los cursos y programas se dirigen tanto a empresarios, emprendedores y autónomos
como a trabajadores por cuenta ajena y delegados de prevención de las organizaciones
sindicales e incluye formación específica adaptada a los riesgos que generan las
distintas actividades económicas. Además existe un programa concreto para delegados
de prevención y empresarios del sector de la construcción en La Rioja y uno dirigido a
autónomos del sector de comercio. Como viene siendo habitual, todas las actuaciones
formativas son gratuitas y la programación está abierta a cuantas modificaciones o
necesidades puedan surgir en cada momento, por lo que la cifra de actuaciones podrá
incrementarse a lo largo del año.
Sindicato del colectivo de los médicos
CCOO considera que la Ley de Mutuas
ha sido "una oportunidad perdida"
Comisiones Obreras ha calificado hoy de "oportunidad perdida" la nueva Ley de
Mutuas, que se aprobó en diciembre de 2014 "sin el necesario consenso" y en la que se
incluyeron modificaciones "que responden más a exigencias puntuales que a un plan
preconcebido de lo que deben ser las mutuas".
En un comunicado, el sindicato ha considerado que la ley reafirma "el carácter privado
de las mutuas", mientras que ha elevado a rango de ley las competencias que diferentes
gobiernos habían atribuido a estas entidades.
Estas competencias son, fundamentalmente, la gestión económica de las prestaciones (la
prestación económica de incapacidad temporal por contingencia común) y la gestión de
otras prestaciones por hijo con enfermedad muy grave o cese de actividad de los
trabajadores autónomos.
A juicio de CCOO, la ley refleja la intención de "seguir derivando a las entidades
colaboradoras más competencias de la Seguridad Social" bajo la idea de que la gestión
privada es más eficaz.
Por contra, el sindicato denuncia que la ley ha escindido la prevención de riesgos
laborales, ya que se establece que las mutuas ya no pueden participar en los servicios de
prevención ajenos o sociedades de prevención.
Asimismo, la federación considera que se mantienen los riesgos de la legislación de
2014 sobre incapacidad temporal, como la actuación de la mutua desde el primer día de
la baja y el conocimiento por las mutuas de los informes complementarios que elabora
el sistema público de salud.
CCOO ha lamentado que la ley no haya mejorado el control de calidad de las mutuas,
así como la introducción de un sistema de incremento del patrimonio histórico de las
entidades a través de cuotas para recuperar los recursos gravados en su momento por la
Intervención de la Seguridad Social.
LAVANGUARDIA.com
Unas buenas condiciones laborales mejoran la rentabilidad de las empresas
El teletrabajo y la flexibilidad de horarios benefician la conciliación de la vida personal y profesional
Los relojes del distrito financiero de Londres dejan bien patente las rutinas horarias de la vida laboral
La crisis económica ha provocado que muchas empresas opten por hacer trabajar a
sus empleados más horas, con menos recursos y a cambio de un sueldo ínfimo. Con
estas medidas, pretenden obtener la misma producción a un coste menor y mejorar
así su cuenta de resultados. Nada más lejos de la realidad. Al empeorar las
condiciones de sus trabajadores, degradan la salud laboral de los mismos y su
eficiencia en el desempeño de las tareas diarias, con lo que a la larga la compañía
acaba por perder fuelle.
“Las empresas más rentables son también las empresas con mejores condiciones de
trabajo”, apunta el profesor del Máster en Salud Laboral del UPF-IDEC, director del
Centro de Investigación en Salud Laboral (CISAL) y catedrático del Departamento de
Ciencias Experimentales y de la Salud de la UPF, Fernando García Benavides.
La salud laboral aborda dos ámbitos principales: la adecuación del entorno para evitar
los accidentes laborales, la inhalación de productos tóxicos y esfuerzos excesivos o
malas posturas que puedan provocar lesiones, y la promoción de hábitos saludables
entre los empleados.
García Benavides subraya que la finalidad es evitar tanto las enfermedades físicas
como las mentales. Estas últimas, cada vez más frecuentes, pueden pasar
inadvertidas y son resultado de la prolongación de las horas de trabajo o de un exceso
de presión para alcanzar objetivos poco realistas.
En este sentido, el académico recomienda implicar a los profesionales de la compañía
para que contribuyan a prevenir los riesgos laborales “con ayuda profesionales bien
formados”, de tal modo que puedan aportar ideas para mejorar su entorno de trabajo.
El auge del teletrabajo y la flexibilidad de horarios
Medidas que han ayudado a mejorar la salud laboral es ofrecer a los empleados la
posibilidad de realizar parte de la jornada desde casa y flexibilizar los horarios, de tal
modo que se trabaje en base a objetivos en vez de contar las horas que pasan en la
oficina.
Estas fórmulas permiten una mayor conciliación de la vida personal y profesional de
los trabajadores, que también se vuelven más productivos porque son ellos quienes
organizan y distribuyen sus horas.
Una prueba de la ineficacia de los horarios rígidos y la costumbre de “fichar” en el
trabajo es el resultado de un estudio elaborado por, que demuestra que los españoles
son quienes más tiempo pasan en la oficina y, a la vez, los menos productivos.
La salud laboral aborda dos ámbitos principales: la adecuación del entorno para evitar
los accidentes laborales, la inhalación de productos tóxicos y esfuerzos excesivos o
malas posturas que puedan provocar lesiones, y la promoción de hábitos saludables
entre los empleados.
García Benavides subraya que la finalidad es evitar tanto las enfermedades físicas
como las mentales. Estas últimas, cada vez más frecuentes, pueden pasar
inadvertidas y son resultado de la prolongación de las horas de trabajo o de un exceso
de presión para alcanzar objetivos poco realistas.
En este sentido, el académico recomienda implicar a los profesionales de la compañía
para que contribuyan a prevenir los riesgos laborales “con ayuda profesionales bien
formados”, de tal modo que puedan aportar ideas para mejorar su entorno de trabajo.
RRHHpress.com
El 64% de los trabajadores españoles creen que lo harían mejor que su jefe si estuvieran en su puesto
El 64% de los trabajadores españoles cree que lo haría mejor que su jefe en el caso
de ocupar su puesto de trabajo, según se desprende de un estudio llevado a cabo por
la consultora de búsqueda y selección de mandos intermedios y directivos, Robert
Walters, sobre una encuesta realizada a más de 500 profesionales.
Así mismo, el analisis de Robert Walters pone de manifiesto que el 54% de los
encuestados preferiría tener a otra persona desempeñando el cargo.
Pese a que prácticamente la mitad de los encuestados desearían ser supervisados por
otra persona, un porcentaje muy similar, 53%, valora a su jefe de manera favorable y
reconoce su papel clave a la hora de promover un buen ambiente de trabajo, como
apuntan el 54% de las respuestas.
Sobre la influencia que ejerce el jefe en el desempeño laboral de los empleados, para
el 55% de los consultados representa un factor de motivación en la empresa, frente al
restante 45% que rechaza su influencia positiva.
A pesar de estas divergencias, existe un amplio consenso en relación al trato que
mantienen con su jefe. Sobre este aspecto, tan solo el 14% admite tener una mala
relación con él.
Habilidades de organización y supervisión, cualidad más apreciada
En cuanto a la cualidad que más valoran los empleados de su jefe, la mayoría destaca
su conocimiento y experiencia (32%). La comprensión y el respeto (19%) que su
superior les manifiesta ocupan el segundo lugar tras la capacidad de trabajo (13%) y
las habilidades de comunicación y presentación (13%).
Por el contrario, quedan relegadas a las últimas posiciones las habilidades de
organización y supervisión, la capacidad de atraer y retener talento y la habilidad
transformadora con el 9%, 6% y 7% de las respuestas, respectivamente.
Son las habilidades de organización y supervisión, precisamente, una de las
cualidades menos valoradas por los profesionales en sus jefes, las que más echan en
falta (26%) de sus superiores. Al igual que es la habilidad que consideran más
importante en un líder empresarial (25%).
Por último, Steve Jobs, co-fundador y expresidente de Apple es el personaje elegido
con el mayor número de respuestas (27%) como ejemplo de gran líder empresarial,
seguido por un 22% que se decanta por el español y expresidente de Inditex, Amancio
Ortega.
Entre los menos populares y con unos resultados más bajos se sitúan Larry Page,
CEO de Google (8%), Bill Gates, presidente de Microsoft (7%) y Richard Brandson,
presidente de Virgin Group (8%).
INFORMAZIO TEKNIKO ETA ZIENTIFIKOA
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INFORMACIÓN TÉCNICA Y CIENTÍFICA
“Aplicación del ejercicio físico como terapia en medicina del trabajo para
pacientes con fibromialgia”
Resumen:
Objetivo: Determinar los principales parámetros cardio-respiratorios de las
mujeres con fibromialgia y su clasificación en función del nivel de afectación para
una posterior prescripción de actividad física.
Conclusiones: Hemos comprobado, como en función del nivel de afectación y la
sintomatología de los pacientes con fibromialgia, sus capacidades
cardiorrespiratorias son distintas; por tanto, no podremos prescribir un ejercicio con
la misma intensidad a mujeres de ambos grupos. En base a estos resultados los
profesionales podrán prescribir actividad física con mayor seguridad y control.
“Trastorno de adaptación. Análisis de la Incapacidad Laboral por
contingencias comunes en Ibermutuamur, Mutua de Accidentes de Trabajo
y Enfermedades Profesionales de la Seguridad Social”
Resumen:
Las enfermedades mentales constituyen una importante causa de Incapacidad
Temporal y absentismo laboral en los países industrializados, con la consiguiente
carga socio-sanitaria e impacto económico que conllevan. Una de las causas más
importante de estas enfermedades son los Trastornos de Adaptación. La
predisposición o vulnerabilidad individual que da lugar a su aparición y
manifestaciones, junto con la dificultad de aplicar criterios diagnósticos
determinantes y cuantificables, hacen que muchos pacientes sean encuadrados en
este diagnóstico y no reciben un tratamiento adecuado a la patología que realmente
padecen, con el consiguiente desajuste temporal en la duración de su situación de
Incapacidad Laboral.